nte la falta de reactivación en las ventas, la planta de ensamble de motos y bicicletas electrónicas podría frenar su proceso productivo durante dos semanas, en julio próximo, otorgando vacaciones anticipadas al personal. Ello obedece a la necesidad de equilibrar el stock como consecuencia de que se produce más de lo que se vende.
La retracción del mercado de venta de motos sigue provocando cimbronazos en una industria que durante varios meses creció en forma sostenida. El cambio de coyuntura comenzó a sentirse con fuerza al cerrar el primer trimestre de este 2018, lo cual derivó en despidos y caída de la producción. Cabe recordar que en mayo pasado la planta Motomel La Emilia desprenderse de unos 130 trabajadores, con el consiguiente impacto que tiene en la economía doméstica esa decisión. Esas desvinculaciones resultaron más fáciles por la modalidad de contratos bajo la cual estaban esos trabajadores, con renovación de tres y hasta un mes.
El panorama actual parece no encontrar un horizonte de mejora, al menos en el corto plazo. De hecho, ante la falta de reactivación en las ventas la planta de ensamble de motos y bicicletas electrónicas podría frenar su proceso productivo durante dos semanas, en julio próximo, otorgando vacaciones anticipadas al personal. Ello obedece a la necesidad de equilibrar el stock como consecuencia de que se produce más de lo que se vende.
Vale agregar que durante junio se hicieron acuerdos para instrumentar vacaciones de aquellos empleados que tenían días pendientes. Desde producido el corte masivo de contratos, no hubo suspensiones ni despedidos. Y ello se debe a las negociaciones permanentes entre el gremio y la empresa, con el objeto de instrumentar medidas que evitan profundizar la pérdida de empleo.
“Por el momento el mercado sigue muy retraído”, explicó Fabián Gigli, secretario de prensa de la seccional San Nicolás de la Unión Obrera Metalúrgica, al ser consultado por este medio.
Números
Un total de 58.038 motovehículos fueron patentados en mayo, lo que significa una merma del 7,4% respecto a abril pasado, según datos de la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (Acara).
La proyección de la entidad es que con un acumulado en lo que va del año de 323.471 unidades, en el año 2018 “disminuirá fuertemente” la venta de unidades “debido a la devaluación de la moneda local y una demanda en retroceso”.
“El informe refleja en todo el 2018 una baja significativa de la gama media/alta debido a la disposición del impuesto interno, una medida sobre la que estamos trabajando todos los protagonistas del sector”, indicó el presidente de la división Motovehículos de ACARA, Gustavo Bassi.
Las motos más vendidas fueron de baja cilindrada: 23.447 unidades de 110 de cilindrada y 13.682 de 150 de cilindrada. En cuanto a marcas Honda supera a Zanella y a ambas le sigue Motomel.
Según Bassi, “el mercado está enfrentando un receso en la actividad. La devaluación de la moneda local provocó una subida en las listas de precios dispuestas por las terminales y una fuerte caída del consumo. Si bien el panorama no es homogéneo en las distintas regiones del país, el dato es que en mayo la baja de las ventas fue notoria y lo veremos reflejado más fuertemente en los próximos meses”.
EL NORTE