La recuperación de parte del predio del Batallón, tierras de propiedad del Estado nacional asignadas al Ministerio de Defensa y con una ubicación privilegiada (flanqueadas por la barranca del río Paraná), constituía un anhelo histórico de la ciudad que atravesó a las distintas gestiones al frente del Departamento Ejecutivo Municipal. En julio del año pasado, el gobierno de Manuel Passaglia logró finalmente la recuperación de una generosa porción de 18 hectáreas en el interior de los muros que interrumpen y dificultan cualquier aspiración de mejora urbanística en esa porción. Desde entonces, el desafío consiste en qué hacer allí. Desde el principio, el municipio tuvo en claro que el principal interés debía pasar por lo recreativo: por la apertura del lugar hacia una forma de espacio público que pueda ser apropiado abiertamente por el ciudadano o el visitante.
Ese desafío es el que hace unos diez días registró (aunque sin anuncios estrepitosos y sin prensa) un importante paso hacia delante: el intendente Manuel Passaglia firmó con la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE) y el Colegio de Arquitectos de la Provincia de Buenos Aires, un convenio tripartito vinculado con la decisión de abrir un concurso de proyectos, proceso mediante el cual se definirá –con ciertas y precisas pautas- qué es lo que finalmente se hará en la porción de tierra delimitada por las calles Terrason, Cochabamba y Rivadavia, con la barranca del Paraná como el cuarto límite.
Lineamientos
Según pudo averiguar EL NORTE, la confección de los pliegos que regirán para el concurso vino avanzando en los últimos días y existe en el Palacio Municipal la expectativa de que la recepción de proyectos pueda comenzar en mayo próximo.
En cuanto a los lineamientos generales, aunque quedarán definidos formal y oficialmente una vez que se dé a publicidad el pliego, hay cuatro que destacarán especialmente. El primero, la porción mayoritaria destinada a espacio público con la zona de balcón al río dentro de ese espacio de reserva. El segundo, el establecimiento de zonas comerciales. El tercero, un desarrollo habitacional en una superficie de 3 hectáreas. El cuarto, la urbanización de la denominada Villa Cavalli, incluyendo soluciones habitacionales para sus habitantes.
Naturalmente, en este punto todo ello es extraoficial. Habrá que ver qué planteará finalmente el pliego de bases y condiciones que regirá para la presentación de proyectos en el concurso público.
La recuperación
El traspaso del predio a manos del municipio y sus condiciones de uso habían sido anunciados el 27 de julio pasado. Manuel Passaglia y el titular de la AABE, Ramón Lanús, firmaban ese día la carta de entendimiento para promover un desarrollo urbanístico en la superficie cercana al río comprendido entre las calles Terrassón y Cochabamba.
Ya en aquel momento Passaglia había dejado en claro que “la idea es seguir trazando una ciudad de cara al río”.
Incorporar esas tierras para utilidad público-privada era un reclamo histórico del Estado municipal, que nunca se había logrado concretar en virtud de la puja de intereses desatada por tratarse de un espacio de ubicación privilegiada.
Una demanda de larga data
EL NORTE le ha dedicado mucho espacio y tinta a la necesidad de recuperar parte de los terrenos del batallón para ser incorporados a los bienes del Estado municipal. Las enormes posibilidades que generan estas tierras para potenciar el perfil de ciudad en su vinculación con el río se suman a la posibilidad de impulsar iniciativas público-privadas que generen oportunidades de desarrollo de esas tierras hoy ociosas.
Durante la gestión del ex intendente Pedro Novau se hicieron diferentes intentos que nunca llegaron a concretarse, más allá de las manifestaciones positivas de los dirigentes nacionales. Luego vino la crisis de 2001, y los intentos cayeron en una especie de cono de sombra del que no se podía salir.
Ya en los comienzos de la primera gestión del ex intendente Marcelo Carignani, en el marco de la visita que realizara a nuestra ciudad el entonces Presidente Néstor Kirchner, el tema volvió a estar en agenda. Al ver el paredón del batallón, Kirchner se comprometió a transferir esas tierras a la ciudad. Pasaron prácticamente quince años y en varias ocasiones recordamos la necesidad de seguir gestionando por esos predios para la ciudad.
Los terrenos del batallón están compuestos por una serie de fracciones, algunas de la cuales fueron donadas para tal fin por familias de nuestra ciudad, otras eran propiedad de FFCC, del Ejército, del Estado Nacional, Provincial y del Municipio.
EL NORTE